Debates, COVID y Elección
Publicado en El País de Cali el 6 de Octubre del 2020
Donald Trump anunció hoy que tiene la intención de participar en el segundo debate presidencial, programado para el próximo 15 de octubre. La intención del candidato será cambiar la narrativa en lo que queda de la elección presidencial, para que el tema de conversación no siga girando en torno a su diagnóstico positivo de Covid-19, o del alto número de infectados alrededor de su círculo más cercano. Es importante tener en cuenta que los debates presidenciales en Estados Unidos no tienen mayor impacto en la decisión final del electorado.
Aunque las encuestas señalaron que la ventaja de Biden aumentó un 1,4% (según el portal FiveThirtyEight), todo indica que este impulso será corto y no influenciará la elección presidencial.
Es importante tener en cuenta que el primer debate fue nefasto para los dos candidatos y su moderador. La opinión generalizada no determinó un claro ganador debido al espectáculo político deplorable, que primó sobre una discusión en torno a planes de gobierno y visiones distintas respecto al futuro del país. Por consiguiente, el segundo debate (aún con su influencia limitada) tiene la obligación de remediar los errores del anterior, especialmente, las constante interrupciones entre los candidatos y el poco liderazgo del moderador para llevar a cabo un debate de altura.
Teniendo en cuenta que el presidente Trump tiene Covid-19, esta elección ha llevado a que los candidatos vicepresidenciales adquieran mayor relevancia. Históricamente, el vicepresidente es una persona que complementa al candidato de turno. John F. Kennedy por ejemplo, quien era considerado muy joven y con poca experiencia, escogió como su vicepresidente a Lyndon B. Johnson, un senador tejano con la experiencia que a Kennedy le hacía falta. Sin embargo, una mala elección puede ser fatal, cuando John McCain escogió a Sarah Palin con la intención de inyectar juventud a su campaña, en últimas terminó restándole seriedad. No obstante, a lo largo de la historia electoral de USA, la influencia directa del vicepresidente en el electorado es casi nula.
Debido a la avanzada edad de Biden, que de ganar sería el presidente electo más viejo en la historia del país, y los recientes problemas de salud de Trump, Mike Pence y Kamala Harris asumen un papel protagónico.
Será interesante analizar cómo el debate vicepresidencial programado para hoy contrastará con el presidencial. Aunque Pence coincida en temas políticos con Trump es un candidato menos pasional e impulsivo, con experiencia en manejar las maquinarias políticas del país, y que sabe evadir preguntas de una mejor manera.
Por su parte Kamala, durante su campaña presidencial fue varias veces consideraba como la candidata que mejor debatía en las primarias.
Harris tiene un instinto para saber cuándo y cómo atacar a su contrincante, sin llevar a cabo ataques personales o descalificadores. Aunado a lo anterior, este debate nos dará una muestra de lo que podrán ser las elecciones en el futuro de Estado Unidos, pues Kamala Harris es considerada una de las candidatas a manejar el partido demócrata y Pence seguramente buscará ser presidente del país, en 4 u 8 años.
MARIO CARVAJAL CABAL
Internacionalista y Ayudante de Investigación en una Consultora Geopolítica
Twitter: @Mariocarvajal9C