Pasaporte Covid-19
Publicado en El País de Cali el 27 de Julio del 2021
Recientemente en Colombia, y alrededor del mundo, se ha desatado una polémica sobre las acciones que han tomado países como Francia y Estados Unidos, que buscan que sólo aquellos ciudadanos que tengan su esquema de vacunación completo puedan ir a restaurantes, bares, entre otros lugares públicos. En el gigante norteamericano, el ascenso exponencial de los casos se debe a la variante Delta y un aumento de personas que no quieren vacunarse. Los casos han incrementado a 56.635 diarios en la última semana y las muertes oscilan entre 275 a 300 diarias. Asimismo, según la doctora Rochelle Walensky, directora de la CDC, el 97% de las hospitalizaciones son personas que no están vacunadas. Lo increíble de esta situación es que, aunque en el país hay vacunas disponibles para todo el que quiera vacunarse, solo un 49% lo ha hecho.
De igual forma, en Francia, en donde los casos han aumentado a 20.000 casos diarios, el parlamento aprobó el proyecto de ley para hacer obligatorio a inicios de agosto la aplicación de la vacuna para ir a restaurantes y bares y montar en avión y tren. De igual forma, aquellos lugares como museos, cines o piscinas, que alberguen a más de 50 personas, deberán requerir que quienes vayan a esos lugares deben estar vacunados o tener un resultado negativo de una prueba reciente de Covid-19.
Igualmente, el proyecto de ley obliga a los trabajadores de la salud a tener completo su esquema de vacunación. Esto a su vez ha causado gran controversia en el país galo, con marchas en contra de las medidas.
Aquellos que se oponen afirman que las disposiciones van en contra de la libertad de los ciudadanos a decidir. No obstante, lo que los opositores olvidan es que mi libertad solo llega hasta donde inicia la libertad de la otra persona. En este sentido, yo no tengo la liberad de contagiar a otras personas de Covid-19.
Uno de los mayores peligros del Covid-19 es que existe un porcentaje importante de personas que son asintomáticos pero que pueden transmitir el virus. De esta manera, la necesidad de vacunarse radica, entre otras cosas, en disminuir la cadena de contagios. Según la CDC, existe evidencia que indica que aquellos que se han vacunado son menos propensos a ser asintomáticos y a ser transmisores del virus.
De igual forma, las vacunas han demostrado ser efectivas contra la variante Delta del Covid-19. Según un estudio publicado en The New England Journal of Medicine, contra esta variante Pfizer tiene una efectividad de 88% y AstraZeneca de 67%. Aunque un experimento en un laboratorio arrojó que Moderna ofrece un 72% de protección, científicos afirman que se necesitan más estudios para establecer el porcentaje de protección de esta vacuna.
Por consiguiente, vacunarse no es una decisión personal, pues el no vacunarse no solo afecta a una persona, sino a todos los ciudadanos. Una persona es libre de tomar sus propias decisiones, pero no es libre de las consecuencias que sus acciones traigan. De esta manera, aquella persona que decida no vacunarse debe atenerse a ver restringida su entrada a ciertos lugares públicos, pues sus acciones están poniendo en peligro a los demás.
Es importante tener en cuenta que, para que los casos disminuyan y vuelva cierta normalidad, cada uno tiene que poner de su parte. El gobierno debe poner de su parte para llevar vacunas a todos los rincones del país, al igual que de hacer campañas de educación e incentivos para que la gente se vacune y los ciudadanos, tenemos que vacunarnos.
MARIO CARVAJAL CABAL
Internacionalista y Ayudante de Investigación en Greenmantle
Twitter: @Mariocarvajal9C